por Mariana Miranda - Junio 8, 2022
Los dos factores que debes considerar para una limpieza facial profunda
Siempre hemos sabido que debemos mantener una piel limpia, pero, ¿te has preguntado cuál es la forma correcta de hacerlo? Parece algo básico, pero sigue leyendo y descubre más allá de lo obvio.
Nuestra piel facial está expuesta todo el día a contaminación, maquillaje, protector solar, rayos del sol que generan sudor y exceso de sebum, por decir solo algunos factores. Todo eso tapa tus poros y obstruye la respiración de tu piel, y claro, si no eliminas esos residuos podrían ocasionarte acumulación de grasa, aparición de imperfecciones como espinillas o granos, además de que no vas a lograr que ningún producto que apliques para cuidado, como sueros o cremas, realmente penetre tu piel y hagan su efecto, ¡uff, no queremos nada de esto! Y al contrario, el tener una limpieza facial adecuada promueve que tenga una mejor textura, suavidad y evite imperfecciones, y claro, que tu amados productos de skincare funcionen de maravilla.
Ok, ok, pero ¿cómo lo hago?
No es complicado, solo debes asegurarte de que se cumplan dos funciones:
1. Retirar los residuos grasos como maquillaje y/o exceso de sebum, y la forma de lograrlo es a través de un producto oleoso para lograr que realmente envuelva esa grasita y la retire correctamente.
2. Terminar de retirar cualquier residuo o bacteria que pudiera quedar con una fase acuosa, que suele ser un gel o jabón que se enjuaga con agua.
¡Y ahora sí, piel profundamente limpia!
Probablemente estés pensando en un concepto que cada vez se escucha más, la “doble limpieza”, que tiene origen en rituales asiáticos, y que sugiere usar para este fin dos o hasta muchos más productos, por ejemplo, desmaquillante más jabón, e incluso agregar aguas micelares y bálsamos.
Pero, ¿sabes qué? No necesariamente tienes que usar dos o más productos, puede incluso ser uno, siempre y cuando reúna el activo capaz de remover grasas y el acuoso que cumpla con terminar de retirar los residuos, así que no se trata de gastar de más ni agregar pasos a la rutina, sino de saber buscar bien y elegir solo lo necesario.
Y si tu piel es grasa, y solo de leer que necesitas usar un ingrediente oleoso ya quieres huir y usar solo el activo acuoso, ¡no lo hagas!, porque precisamente el usar un aceite ayudará a penetrar mejor los poros y capturar la grasa existente. Así que ahora ya sabes, asegura la doble función oleosa y acuosa y ¡manos a la obra para una piel limpia a profundidad y lista para recibir los nutrientes de los siguientes pasos de tu rutina!
Y claro, recuerda que Metéca tiene esos productos ideales que tu piel necesita para tonificarse, hidratarse y regenerarse. ¡Conoce nuestras rutinas!