Errores comunes durante la rutina de skincare
Construir una rutina de skincare requiere más que constancia. No sólo hay que aprender sobre nuestra piel, sino que hay errores muy comunes que pueden restarle eficacia a los productos y nuestra rutina. Te contamos algunos de los errores más comunes en las rutinas de skincare para seguir aprendiendo y crear la mejor rutina para nosotros.
Errores comunes
- Orden correcto de los productos.
Es muy común que cuando iniciamos nuestra rutina de skincare usamos muchísimos productos creyendo que entre más usemos, mejores serán los resultados. Y en ocasiones, no sabemos cuál es el orden correcto de los productos, o si entre ellos no causarán reacciones adversas. Los pasos de nuestra rutina de skincare tienen una lógica basada principalmente en la densidad de los productos, por ello es recomendable aplicar serums antes de la crema hidratante, o aplicar bloqueador al final de la rutina. Si los aplicamos en un orden distinto, no permitiremos que los productos penetren en la piel y hagan su trabajo.
- Ser agresivos con la piel.
Nuestra piel resiente la manera en la que la tratamos, incluso cuándo aplicamos productos que pueden ser beneficiosos. Es decir, hay que evitar jalonear y frotar la piel innecesariamente cuando aplicamos cremas u otros productos. Es recomendable dar ligeros golpecitos para distribuir el producto y que logre concentrarse en los poros de manera correcta. Esto evita que estiremos la piel y que el producto no permanezca únicamente en la capa superior del rostro.
- Mezclar ingredientes.
Conocer los ingredientes de los productos que utilizamos es muy importante. No sólo porque nos ayuda a saber que estamos aplicando en nuestro rostro y evitar alergias o efectos secundarios indeseados. También es importante porque muchas veces existen ingredientes que causan reacciones negativas al ser combinados. Por ello, es recomendable utilizar productos de una misma marca. Al momento de crear productos, las marcas toman en cuenta los ingredientes y cantidades que utilizan en cada uno de sus productos, evitando que al combinarlos existan reacciones químicas.
- No hidratar la piel.
Antes se creía que si tu piel tiene una tendencia grasosa, lo mejor que podías hacer era no hidratarla. ¡Pero esto es un grave error! Todas las pieles, sin importar la estación del año, necesitan ser hidratadas con cremas y serums. Descubre tu tipo de piel y cómo cambia a lo largo del año para saber en qué cantidades y de qué manera es mejor hidratarla.
Recuerda que las rutinas de skincare son distintas para cada persona. Encuentra una rutina que se adapte a tus tiempo y necesidades, y ten cuidado de no cometer alguno de estos errores para que veas los resultados en tu piel muy pronto.